El atrayente actúa como un edulcorante natural que debe colocarse en el fondo de la trampa para avispas. Atrae a las avispas para que se arrastren por la pequeña cesta de la trampa. Una vez que las avispas quedan atrapadas en la trampa, no hay forma de que salgan y acabarán ahogándose en el atrayente. Cabe destacar que el cebo no es en absoluto tóxico y se basa en ingredientes biológicos que sólo atraen a las avispas. No afecta a las abejas ni a otros insectos beneficiosos.